Un total de 28 pruebas de alcoholemia se practicó el fin de semana y de éstas, el 50 por ciento de los conductores resultó con aliento alcohólico, otro 30 por ciento con estado de ebriedad y el resto presentó aliento permitido.
El director de Vialidad y Movilidad Urbana, Luis Morales Cortés, rechazó la idea de que un sorbo de bebidas alcohólicas representa el riesgo de caer en una conducta sancionable, aunque reconoció que el objetivo de estas medidas es inhibir su combinación con el volante.
La realización de los operativos de alcoholemia, cuyos nuevos márgenes de tolerancia entraron en vigor el pasado fin de semana, cuentan siempre con la presencia de integrantes del Consejo Consultivo de Vialidad y demás observadores, entre los que pueden estar la Comisión Estatal de Derechos Humanos, asociaciones de abogados y demás personas que estén interesadas en atestiguar cómo se llevan a cabo.
Sostuvo Morales que en el caso de los motociclistas, la tolerancia es cero, es decir que 0.10 miligramos de alcohol por litro de aire espirado son suficientes para una sanción, considerando la naturaleza del vehículo y la exposición que esto conlleva.
SOBRE LAS NUEVAS DISPOSICIONES
El titular de Vialidad consideró que estas nuevas disposiciones, que no surgieron del Municipio sino de la Federación, están más perfiladas a inhibir la combinación alcohol-volante entre el grupo de jóvenes de 18 a 29 años de edad, los más asiduos a salir de fiesta y que por alguna razón no miden las consecuencias de los riesgos que conlleva conducir bajo los efectos de las bebidas embriagantes.
Por parte de la instancia municipal, se han efectuado distintas campañas a ese sector específico, tales como las que se llevaron a cabo el fin de año, invitando a los jóvenes a que si van a tomar, no conduzcan, y se han tenido resultados favorables en una notable disminución de los percances por este motivo.
