El secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro. (ARCHIVO)
El secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, pidió este martes reconocer las actas electorales en poder de la oposición venezolana y que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, reconozca la derrota y deje paso "al retorno de la democracia" en el país.
En un comunicado, la Secretaría General indicó que "el CNE (Consejo Nacional Electoral) aún no ha podido presentar las actas por las que habría ganado, lo cual a esta altura sería risible y patético sino fuera trágico".
En opinión de Almagro, "resulta imperioso" que Maduro acepte las actas en poder de la oposición liderada por Edmundo González Urrutia y María Corina Machado y "en consecuencia aceptar su derrota electoral y abrir el camino al retorno a la democracia en Venezuela".
"De no hacerlo, sería necesaria la realización de nuevas elecciones" con la presencia de observadores electorales de la Unión Europea y la OEA, según señala el comunicado.
Almagro también pidió la creación de un nuevo CNE para reducir las irregularidades institucionales que, en su opinión, plagaron el proceso electoral que culminó con las elecciones del pasado domingo, cuyo resultado ha sido puesto en duda por varios países ante la falta de detalles sobre el escrutinio.
El CNE de Venezuela proclamó la victoria de Maduro con un 51,20 % de los votos frente al 44,20 % del opositor Edmundo González Urrutia, con un 80 % escrutado y sin desagregar los resultados.
La oposición antichavista asegura tener en su poder las actas emitidas en el proceso electoral y han habilitado un buscador para mostrarlas a la ciudadanía.
Machado aseguró que la oposición mayoritaria logró obtener el 73 % de las actas emitidas en las presidenciales, que dan -aseveró- la victoria a González Urrutia, con una diferencia "apabullante", contrario a lo anunciado por el CNE.
"El manual completo del manejo doloso del resultado electoral fue aplicado en Venezuela la noche del domingo, en muchos casos de manera muy rudimentaria", lamentó Almagro.