En cinco juegos, el miércoles de la semana pasada concluyó la Serie Mundial 2024 entre los Dodgers de Los Ángeles y los Yanquis de Nueva York. Contrario a lo que razonablemente se esperaba, la Serie no resultó tan competitiva como inicialmente se pensó. Por diversas razones que lo explican (en bateo, en pitcheo y en particular en el quinto encuentro por errores a la defensiva de los Yanquis) la superioridad de los Dodgers fue clara y contundente.
No pocos seguidores de los hoy campeones del mejor beisbol del mundo, expresaron su deseo de que la Serie Mundial se extendiera hasta el sexto juego. Por dos razones: la primera, a fin de que la coronación se diera en la casa de los Dodgers, ante su afición y no en terreno ajeno, como ocurrió. Y la segunda por la fecha, es decir, el viernes 1 de noviembre que correspondería al sexto juego, que no llegó, porque habría sido precisamente el día del cumpleaños número 64 del gran Fernando “El Toro” Valenzuela, icono, símbolo y estandarte de los Dodgers, fallecido el pasado 22 de octubre. Qué mejor homenaje, qué mejor tributo para él que la obtención del cetro por los Dodgers en esa fecha. Pero los hados del beisbol dispusieron otra cosa.
Los suspicaces, que nunca faltan, difundieron la versión de que seguramente así iba a suceder, no tanto como homenaje a Valenzuela sino para obtener las decenas de millones de dólares que un juego del Clásico de Otoño produce tanto por concepto de taquilla como por derechos de transmisión de radio y televisión.
Pero se equivocan quienes tales especulaciones hacen, como lo demuestra un sencillo análisis de la información histórica de lo sucedido en las Series Mundiales modernas, iniciadas a partir del año 1903. Desde entonces y hasta 2024 se han jugado 120 Series. Debían ser 122, pero en un par de años no se jugaron, la de 1904 y la de 1994, según explicamos aquí el miércoles pasado.
De las 120 Series, 116 han sido a ganar cuatro de siete juegos posibles, y cuatro se realizaron a ganar cinco de potenciales nueve encuentros, que fueron éstas las de los años 1905, 1919, 1920 y 1921. Todas las demás han sido a ganar cuatro juegos, como ya se dijo.
Si a los llamados sospechosistas les asistiera la razón, todos o casi todos los Clásicos de Otoño se habrían ido a siete juegos o al menos a seis. Pero no ha sucedido así. Históricamente han sido como sigue: En cuatro juegos han concluido 22 Series Mundiales (19% del total), en cinco juegos 28 series (24%), en seis juegos 27 (23%) y en siete juegos 39 series (34%).
De las cuatro Series que hubo en el pasado a ganar cinco de nueve juegos, ninguna se fue al número máximo. Tres concluyeron en ocho juegos y la otra en siete.
Don Pedro “El Mago” Septién solía decir -y no le faltaba razónque el beisbol es “mucho deporte para ser negocio, y mucho negocio para ser deporte”. Ciertamente, pero hasta ahora se ha conducido conforme a criterios éticos.