El dirigente nacional del PRI, Alejandro 'Alito' Moreno. (ARCHIVO)
El dirigente nacional del PRI, Alejandro "Alito" Moreno, se pronunció sobre los resultados electorales y la ruptura con los miembros críticos a los cambios aprobados el pasado domingo en la Asamblea Nacional.
"Alito" Moreno ha enfrentado fuertes críticas de los llamados "cuadros distinguidos" en el partido, como Dulce María Sauri, exmiembros del gabinete de Peña Nieto y el exgobernador Manlio Fabio Beltrones, quien será senador en la siguiente Legislatura.
Moreno apuntó de inicio que en el partido "ya se acabó eso cuadros distinguidos...no tienen nada, todos esa bola cínicos y corruptos que atacan hoy al PRI, de distinguidos no tienes nada, son los principales lastres que han atacado al partido, por culpa de todos ellos y lo que ocurrió en el pasado el Pemexgate, los vinculados al asesinato de nuestro candidato presidencial Luis Donaldo Colosio, la Operación 'Safiro', todo eso fue hace años y la consecuencia de que el PRI generara en la sociedad una mala imagen".
Culpando a sus antecesores y los casos de corrupción en en el pasado atribuyó los resultados obtenidos.
"Purga"
Manifestó que desde distintas partes del país ya se empezó a solicitar la expulsión del partido y estas se turnarán a la Comisión de Justicia Partidaria, donde le darán trámite.
"Quienes atentan contra la unidad, quienes atentan contra el partido y quienes no cumplen con un catálogo, tienen las sanciones establecidas en los estatutos".
Responsabilidad de la debacle electoral
Declaró que asume la responsabilidad de la debacle electoral que encabezó con la alianza del PAN y el PRD, donde la candidata presidencial Xóchitl Gálvez obtuvo poco más de 15 millones de votos, en comparación con Claudia Sheinbaum que consiguió 35 millones de votos.
Reiteró que los críticos a su dirigencia "le quieren endilgar algo que no me corresponde a mi...este grupo es los que le generaron la peor imagen al PRI, porque está en la historia".
Moreno refirió que la derrota en el 2024 fue por factores como no contar con la presencia territorial que tenía antes el PRI, ir en coalición sin candidato presidencial 'nacido en el partido'.