. Tras cantar varios de sus éxitos y recibir obsequios de sus seguidores, la intérprete empezó a verse sofocada, tan es así que pidió una silla y confesó a la gente que no se sentía bien.
Hace 12 años, la música de habla hispana perdió a una de sus grandes estrellas, Jenni Rivera. El 9 de diciembre de 2012, la gente estaba al pendiente de las redes sociales y los medios de comunicación, ya que la llamada “Diva de la banda” había desaparecido, junto con su equipo, tras volar de Nuevo León a Ciudad de México, en su avión privado.
Con el paso de las horas, se supo que su aeronave se desplomó. La cantante murió, al igual que sus acompañantes. Iban a CDMX para formar parte de La Voz México, en donde Rivera fungía como coach. Paulina Rubio la esperaba porque armarían un performance musical en el programa.
Los fans de la artista quedaron en shock y todavía la recuerdan, pues en redes se han viralizado videos en los que aparecen llorando con el arribo de la fecha de hoy.
Conocida también como “La Gran Señora”, la intérprete de De contrabando realizó varias presentaciones en la Comarca Lagunera; las últimas, en su mayoría, fueron en el Palenque de la Feria de Gómez Palacio. Lucían repletas. Se sabe que su siguiente espectáculo en estas tierras ocurriría en el Coliseo Centenario.
Sin saber que sería su concierto final en la Comarca, ella actuó en el palenque el 27 de julio de 2012 ante siete mil personas.
Los organizadores informaron en aquel entonces que dos mil no alcanzaron boletos, así que pedían otra fecha. Aquel día, la cantante sufrió una leve descompensación de la presión arterial, pero aun así complació a los asistentes.
“Muchas gracias por su apoyo, aplaudo por estar aquí esta noche… espero que se diviertan… ustedes pueden decir que una vez más valió la pena haber visto a Jenni Rivera”, así se dirigió ella a la audiencia.
Tras cantar varios de sus éxitos y recibir obsequios de sus seguidores, la intérprete empezó a verse sofocada, tan es así que pidió una silla y confesó a la gente que no se sentía bien, además de que anunció que su madre, Rosa Rivera, ahí estaba.
La artista tuvo que retirarse por varios minutos para ser atendida por paramédicos.
Ellos pedían chocolates para la cantante, pues comentaron que su presión arterial no era la mejor y que traía detalles de baja de azúcar. Cuando la Diva volvió, fue recibida con ovaciones. Continuó cantando más de sus temas y al final agradeció a los laguneros su apoyo.
